Estás sentado; frente de ti, sobre la mesa, hay un cubo de Rubik. Sólo puedes ver el lado frontal del cubo. No puedes moverlo; ni tocarlo. Pero si te levantas, podrás ver un lado distinto; el lado de visión paralelo al suelo. Si continúas moviéndote, mirarás los lados faltantes. Pero, hay un lado que no podrás ver: el que está boca abajo, en la mesa. Así es «Climax» de Gaspar Noé. Un Rubik que no puede ser tocado. Completado —y que no quiere serlo—. La cinta es clara. Pero, solo en una cosa: está escrita y filmada basada en sucesos reales. Pero, parece no estar dispuesta a contar algo. Sino, en mostrar. Gaspar Noé. Es cierto que los personajes hablan —y bailan— en lugares distintos del edificio, tanto que sorprende que los otros no escuchen. ¿Qué tan grande se hace la habitación, el hogar como para no sentirnos tan cercanos con el otro aún de que las voces en el espacio son audibles? El baile inicial, tras terminar el prelude de la cinta, donde los entrevistan, parece no tener mu...
Existimos personas las cuales no recordamos cosas de la infancia. Pero hay otras personas las cuales recuerdan el color de su primer juguete, la sensación al abrazar su oso de peluche e incluso que jugaban con un amigo imaginario llamado Red. Aunque, hay cosas que parece que nunca olvidaremos, por ejemplo, que hemos visto una película en donde un hombre quiere robar un banco y todo le sale mal, que aparecen hackers traídos de Alemania para entrar a las computadoras de una empresa millonaria sin ser detectado, que utilizan equipos sofisticados de explosiones y herramientas costosas para forzar bóvedas. Sabemos que vimos una película donde algún perdedor quiere robar un banco, pero no sabemos el nombre de dicha película. Todos quieren robar bancos en las películas, todos somos perdedores que mientras estamos haciendo la fila en un banco miramos alrededor buscando cámaras de seguridad, como si acaso pudiésemos robar algo. Así que no hace falta el querer recordar cuál es el nombre de la p...