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El dolor de tener que crecer [Sobre "Nueve reinas" (2000) de Fabián Bielinsky]

Existimos personas las cuales no recordamos cosas de la infancia. Pero hay otras personas las cuales recuerdan el color de su primer juguete, la sensación al abrazar su oso de peluche e incluso que jugaban con un amigo imaginario llamado Red. Aunque, hay cosas que parece que nunca olvidaremos, por ejemplo, que hemos visto una película en donde un hombre quiere robar un banco y todo le sale mal, que aparecen hackers traídos de Alemania para entrar a las computadoras de una empresa millonaria sin ser detectado, que utilizan equipos sofisticados de explosiones y herramientas costosas para forzar bóvedas. Sabemos que vimos una película donde algún perdedor quiere robar un banco, pero no sabemos el nombre de dicha película. Todos quieren robar bancos en las películas, todos somos perdedores que mientras estamos haciendo la fila en un banco miramos alrededor buscando cámaras de seguridad, como si acaso pudiésemos robar algo. Así que no hace falta el querer recordar cuál es el nombre de la p

Lo siento, no sobrevivirás [Sobre Halloween (1978), de John Carpenter]

Un grupo de jóvenes está en una típica fiesta de película, beben cervezas y están sentados en un sillón frente al televisor. Uno de ellos toma el control, pausa la película que ven y lanza tres reglas para sobrevivir en una película de terror. 1. No tener sexo, 2. No beber alcohol o consumir drogas y 3. No decir “Ahora vuelvo”, pues nunca volverás. La película en que se dictan estas reglas es Scream (1996) de Wes Craven y la que ven en el televisor es Halloween de 1978, dirigida por el maestro John Carpenter y que sería la pieza fundamental del slasher norteamericano. Si bien, ya existían estas películas que desplazan a los monstruos y ubican la figura del mal en una persona de carne y hueso, fue Halloween la que produjo la explotación del subgénero en los años que le siguieron.

John Carpenter y Debra Hill comenzaron a desarrollar la idea para Halloween a partir de un concepto simple pero efectivo: un asesino en serie que ataca en la noche de Halloween en una pequeña ciudad suburbana. La premisa se centra en la sensación de que el mal podía acechar en los lugares más cotidianos y en una fecha festiva aparentemente segura. Así que la trama de Halloween, sencilla por demás, sigue a Laurie Strode (interpretada por Jamie Lee Curtis), una adolescente que se convierte en el objetivo de Michael Myers, un paciente psiquiátrico que ha escapado en las vísperas de la noche de brujas y que vuelve Haddonfield a continuar una masacre que inició quince años antes con el asesinato de su hermana mayor. Ahora Laurie tendrá que sobrevivir a los múltiples ataques de Myers y de paso convertirse en un arquetipo de “chica final”. El público amó Halloween y así se sentaron las bases de un subgénero cinematográfico de explotación que nos sigue hasta hoy y que podemos rastrear con facilidad en ese abarrotado conjunto de películas llenas de cuchillos y sangre. Y pues, Carpenter lo hace parecer muy sencillo:
  1. Asesino enmascarado: uno de los elementos icónicos del género slasher es la presencia de un asesino en serie que oculta su rostro detrás de una máscara. En Halloween, Michael Myers, el antagonista principal, usa una máscara blanca, creando una imagen memorable y aterradora (cuenta William Shatner que cuando vio la película, se dijo: “ese soy yo”. Lo cierto es que la máscara de Myers es en realidad una máscara del Capitán Kirk de Star Trek modificada por el mismo Carpenter).
  2. Altas tasas de mortalidad: en el género slasher, los personajes, en su mayoría jóvenes, a menudo enfrentan una alta probabilidad de ser asesinados a lo largo de la película. Halloween no es la excepción, ya que cinco personajes encuentran un destino sangriento (en realidad Halloween tiene la tasa más baja de mortalidad si la comparamos con sus sucesoras).
  3. Violencia gráfica: las películas de slasher son conocidas por su representación gráfica y explícita de la violencia. Halloween no escatima en mostrar escenas de asesinato sangrientas y perturbadoras. Otro lado de la misma moneda es la presencia de mujeres hermosas con poca ropa, que no la protagonista, y que invariablemente terminarán muertas (Myers asesina a Judith, su hermana mayor, cuando esta se encuentra semidesnuda y allí podemos verla, a través de la máscara del pequeño asesino).
  4. Persecuciones intensas: las secuencias de persecución son un elemento clave del género slasher, y Halloween se destaca en la creación de intensas persecuciones a lo largo de la película, especialmente cuando Michael Myers persigue a Laurie Strode.
  5. Escenario claustrofóbico: el subgénero slasher a menudo elige entornos cerrados como escenario principal. En Halloween, gran parte de la acción se desarrolla en una casa suburbana, lo que contribuye a la sensación de aislamiento y vulnerabilidad de los personajes.
  6. El enfoque en una "chica final": este arquetipo es común en las películas de slasher, donde una heroína lucha por sobrevivir contra el asesino. Lo vemos calcado en Nancy Thompson de A Nightmare on Elm Street, también con Erin Harson de The Texas Chainsaw Massacre y una de las mayores supervivientes, Sidney Prescott de la saga Scream.
  7. Asesino misterioso: si bien uno puede especular, la película mantiene en secreto la motivación de Michael Myers y su identidad detrás de la máscara, lo que agrega un elemento de misterio y temor al personaje, otro rasgo común en este subgénero.
  8. Falta de supervisión: es común que en estas películas las víctimas sean jóvenes súper hormonados que se encuentran en una casa-fiesta-lugar apartado, conectado con el numeral 6, con muy escasa supervisión adulta, ¿qué podría salir mal?
  9. La muerte inicial: esta regla es de oro e infranqueable. El primer personaje en aparecer, muere. A escasos seis minutos del inicio tenemos la muerte de Judith Myers. Pasa igual con Casey, interpretada por Drew Barrymore, al arranque de Scream y que, curiosamente, dice que su película de terror favorita es Halloween.
  10. Sagas: si algo caracteriza a un buen slasher, y Halloween no es la excepción, es su bajo presupuesto, su alta rentabilidad y la disposición para exprimir la idea al máximo sacando año tras año, una nueva pieza (hace apenas unos días se informó que Miramax se hizo con los derechos de la saga, por lo que en breve tendremos noticias de un reinicio). Y quizá es de aquí que se desprende de una última regla para sobrevivir a una película de terror: nunca des al asesino por muerto.
Así que, visto lo visto, si te encuentras en una película de terror es muy poco probable que sobrevivas.

Ficha técnica
Nombre Halloween
País: Estados Unidos
Año: 1978
Dirección: John Carpenter
Producción: Debra Hill
Guion: John Carpenter y Debra Hill
Música John Carpenter
Fotografía: Dean Cundey
Montaje: Tommy Lee Wallace, Charles Bornstein
Protagonistas: Jamie Lee Curtis, Donald Pleasence, P. J. Soles, Nancy Loomis
Género: Terror, Slasher
Duración: 91 minutos

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